martes, 20 de julio de 2010
John Fante: Pregúntale al polvo
No vengas en seguida, Camila; deja que esté un rato solo para acostumbrarme a este insólito entusiasmo; permíteme estar solo mientras viajo con la cabeza por el encanto infinito de tu gloria radiante; déjame solo un ratito nada más para desear y soñar con los ojos bien abiertos.
sábado, 17 de julio de 2010
Robert Musil: Tes mujeres, Tonka
A menudo esto se convertía en sueños –o tal vez en un principio lo hubieran sido–, sobre cuyo pálido mundo de sombras él se levantaba cuando quedaba libre del peso de su trabajo, como si fuera para avisarle que este trabajo no era su vida auténtica.
martes, 6 de julio de 2010
Sandor Marai: La amante de Bolzano
Como si fuera la única situación natural y razonable en la vida humana, como si no se pudiese comprender por qué hasta entonces habían hecho otras cosas, por qué habían vivido otras situaciones, como si hubieran estado preparándose para ese instante durante mucho tiempo, con toda su voluntad, con todo su deseo, en la vigilia y en el sueño.
sábado, 3 de julio de 2010
Henry Miller: Nueva York, ida y vuelta
Te aseguro que era un sueño. La miré furtivamente mediante el espejo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)